Diego Salva Lezaun y Carlos Sáenz de Tejada, jóvenes guardias civiles, han sido asesinados en la localidad mallorquina de Palmanova, municipio de Calviá, cuando una bomba lapa adosada a los bajos del vehículo oficial que iban a utilizar explotó poco antes de las dos de la tarde de ayer.
.
El atentado se ha producido 33 horas después de otro que la banda terrorista ha cometido con una furgoneta robada, cargada con más de 200 kilos de explosivo, contra el cuartel de la Guardia Civil de Burgos, que ha producido más de 60 heridos y destrozos en las 14 plantas del inmueble.
Con estas acciones criminales la banda terrorista se ha lanzado a una ofensiva extremadamente virulenta contra el Estado, a pesar de la debilidad política en la que se encuentra, puesto que cada atentado como los producidos en estos días la aleja más del sentir de los vascos y españoles que la rechazan muy mayoritariamente. Es preciso, pues, seguir insistiendo en la desligitimación social de la banda y los métodos que utilizan para alcanzar las metas políticas que se ha planteado, tras 50 años que hoy se cumplen de su existencia.
En realidad, el terrorismo de ETA nunca ha conseguido, ni conseguirá, ninguno de los objetivos políticos que la banda pretende. Se ha convertido en un anacronismo en la Europa moderna y en el mundo occidental, y sólo se puede asimilar a los grupos de iluminados terroristas islamistas que giran alrededor de la órbita de Al Qaeda.
Condenamos estos atentados y nos solidarizamos con los familiares, amigos y compañeros de las víctimas. Sabemos que el Estado de derecho es fuerte y pronto dará con los autores que terminarán en la cárcel, el lugar en el que irremisiblemente acaban todos estos terroristas etarras.
.
(Fotos de elcorreodigital.com)
.
