La sala de los Derechos Humanos y de la Alianza de las Civilizaciones, ubicada en el Palacio de las Naciones Unidas de Ginebra, ha sido inaugurada esta mañana por los Reyes de España, don Juan Carlos y doña Sofía, el Presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, el Secretario General de la ONU, Ban Ki Moon, y otras autoridades.
Lo singular de esta obra es su cúpula, un espacio de 1.400 metros cuadrados decorado por el controvertido artista español Miquel Barceló (Felanitx, 1957). El pintor mallorquín ha trabajado en su decoración durante los últimos dos años. El resultado ha sido una bóveda que simula un mar agitado que se mueve de Sur a Norte -de África a Europa- y una gran cueva con cientos de estalactitas que reflejan múltiples colores según sea la luz que incide sobre ellas.
La polémica envuelve la obra artística de Barceló desde varios puntos de vista. En primer lugar, porque España se hizo cargo del trabajo de remodelación de la sala que ha costado 20 millones de euros, de los que 500.000 provienen del Fondo de Ayuda al Desarrollo (FAD). Para muchos, un organismo como la ONU y un país como el nuestro, no debieron gastar tanto dinero en recreaciones artísticas que son absolutamente innecesarias. Muchos hacen cuentas de las múltiples obras que podrían realizarse con estos euros en lugares como África donde la necesidad de los dineros de este fondo es evidente.
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En segundo lugar, cada vez son más fuertes las críticas contra el "papanatismo cultural" existente en nuestra sociedad. Piensan que la obra de Miquel Barceló ni es expresionismo, como dicen algunos, ni es nada. Sólo se puede encuadrar dentro del estilo popularmente llamado "tomadura de pelo".
Hace mucho tiempo que la fábula del "rey desnudo" es aplicable a multitud de creaciones artísticas -pictóricas, escultóricas, literarias, musicales, escénicas...- con las que se bombardea a la sociedad moderna. El problema es que nadie se atreve a gritar en público "¡el rey va desnudo!", salvo que se arriesgue a que le tachen de inculto y tonto.
Quién sabe. Quizá dentro de unos años acabe siendo el símbolo de la Alianza de Civilizaciones, y, con su ayuda, pueda conseguirse una paz que cada vez parece más difícil. Si es así, aunque el rey vaya desnudo podremos afirmar que el arte no tiene precio porque habrá contribuido a lograr un gran objetivo.
3 comentarios:
las buenas cosas de zapatero....el pais en crisis y el da 20 millones de euros para esta puta mierda....
muy bien sr. zETAp
El insulto al Presidente del gobierno de todos los españoles, asimilándolo a la banda de asesinos ETA es injusto. Seguramente es porque no sabe lo que supone ETA en una sociedad como la vasca. Denota la categoría moral e intelectual de quien utiliza esta fórmula para expresar la crítica política, si es que es eso lo que pretende.
Estoy seguro de que Serrana de Kintanar está en condiciones de hacer crítica política con argumentos en lugar de hacerlo con insultos de este tipo, que, por otra parte, están ya muy vistos por ser un recurso fácil.
Si todos pensáramos como dice la Serrana, no habría obras de arte en el mundo, ni siquiera la catedral de Burgos.
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