Campeón dentro de la pista de tenis. Ha ganado el Open de Australia, el primero de los grandes de la temporada y nada menos que contra, probablemente, el mejor jugador de todos los tiempos, el suizo Roger Federer.
El español, Rafael Nadal, ha vencido hoy en la emocionante final del torneo a Federer por 7-5, 3-6, 7-6, 3-6 y 6-2. Con esta victoria reafirma su condición de número uno del mundo.
Pero, sobre todo, Nadal es un campeonísimo fuera de la pista. Un joven de 22 años que siempre ensalza a sus rivales, que les da ánimos después de vencerlos, un chico que nunca alardea de su superioridad deportiva, que no muestra ni pizca de soberbia..., un joven sencillo, tranquilo, humilde, con la cabeza muy bien amueblada.
Pone en práctica, en su actividad deportiva, valores que deben impregnar la vida de las personas: el esfuerzo, la constancia, la paciencia, la serenidad... son sus señas de identidad. Por algo es Premio Príncipe de Asturias 2008. Los españoles vibramos con su juego. Estamos orgullosos de tener un joven como él.
.
2 comentarios:
Chicos como éste deben ponerse de ejemplo cuando se explique la asignatura controvertida Educación para la Ciudadanía.
Tenemos jóvenes excelentes en España. Nadal es un referente. Su mayor éxito es la categoría que siempre muestra con sus rivales, tanto cuando gana como cuando pierde. Olé por este chico.
Publicar un comentario