En la ciudad andaluza de Córdoba, los caballos que tiran de coches para turistas van a ir muy aseados. Llevarán puestos sus pañales para evitar que las cacas ensucien las calles y facilitar así que el aroma de los jazmines cordobeses pueda volar libremente por el aire de la capital del califato.
.
Los cocheros tendrán que hacer algún cursillo maternoinfantil para limpiar el culito a los caballos y aprender a poner y quitar pañales.
Los equinos se sentirán más incómodos con la bolsa bajo el rabo. Tal vez se pasen la jornada de trabajo 'berreando' como los bebés. Por si acaso, no estaría de más ir haciendo acopio de chupetes caballares.
Las calles estarán más limpias, se ahorrará mucho agua y los empleados de la basura se sentirán muy agradecidos.
La capital del califato de Córdoba va a ganar muchos enteros en la mejora del servicio turístico.
Ahora le toca a Sevilla, Málaga...
No hay comentarios:
Publicar un comentario