domingo, 2 de marzo de 2008

De florero

Es inaudito. Entre Zapatero y Rajoy volverá a estar un "florero" moderando el segundo y último debate, anterior a las elecciones generales del próximo día 9 en España. El acontecimiento está previsto para mañana día 3 a partir de las 22 horas. Será difundido por varias cadenas de televisión y radio, así como múltiples canales que operan en internet.
El debate está pactado reglamentado, encorsetado y absolutamente estructurado por las cúpulas del PSOE y del PP.
Por favor, que nadie se enfade porque con esta imagen no trato de denigrar a Manuel Campo, dicen que moderador del debate del pasado día 25, ni a quien mañana realizará la misma función, Olga Viza, por los que siento especial consideración como profesionales.
Pero es que uno comienza a preocuparse cuando ve para qué quieren algunos poderosos a los periodistas, que ya solo están para moderar falsos debates, recoger la nota de prensa, variar o parafrasear algunos párrafos y publicarlo en sus respectivos medios, sin preguntas, por supuesto. "Usted coma lo que yo le doy y no pida otro menú".
Y la preocupación crece aún más al comprobar que los periodistas se someten a los caprichos de estos aprendices de brujo. La figura del "florero" entre los dos candidatos a la Moncloa es patética pero es real. El periodista-moderador nada puede decir, salvo el título del bloque a debatir -economía, seguridad, temas sociales- y el tiempo de que dispone cada contendiente para soltar su particular soflama.
Pues bien, si ha de ser así, propongo se intercale entre ambos un figurín como los que se colocan en campos de fútbol y pabellones deportivos simulando que las gradas se hallan más ocupadas de lo que realmente están, y se le adose a su espalda una cinta reproductora para que, al consumirse el tiempo establecido en cada intervención, la locución avise a Zapatero y Rajoy de tal circunstancia, y nada más. Sugiero que lo haga tal cual trabajan las cintas conectadas a los teléfonos de atención al cliente que las grandes empresas han generalizado a través de sus call center: "para hablar de economía marque un uno; si quiere replicar, marque un 2; para insultar, pulse un 3..." Sería mucho más práctico y barato; al fin y al cabo, aunque poco, un periodista cobra.
Y, mientras tanto, ¿qué dicen las asociaciones y colegios de periodistas? Poca cosa, y con sordina.
A este paso, no es necesario matar al mensajero porque él solito se muere.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Querido, por supuesto que visitare tu blog, a menudo. Mucha suerte y adelante.

Anónimo dijo...

Hasta que los periodistas no se planten ante abusos de este tipo no se recuperará la dignidad de esta profesión.
Las asociaciones y colegios de periodistas no defienden con decisión al colectivo.